Pilotos dominicanos rinden homenaje al capitán fallecido en accidente de Washington

 

New York. – Una comisión de pilotos dominicanos de la organización Dominican Pilots Abroad viajó a Nueva York para asistir al funeral del capitán Jonathan J. Campos. Este piloto de ascendencia latina comandaba el vuelo de American Airlines que sufrió un trágico accidente en Washington, D.C. Su despedida congregó a colegas, familiares y amigos, quienes recordaron su pasión por la aviación.

Un piloto con raíces puertorriqueñas y formación destacada

Jonathan Campos, de 34 años, nació en Brooklyn, Nueva York, y pasó parte de su infancia y adolescencia en Puerto Rico, donde vivió durante diez años. Posteriormente, se mudó a Florida, donde obtuvo su licenciatura en Ciencia Aeronáutica en la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle y su licencia de piloto en Epic Flight Academy, ubicada en New Smyrna Beach.

La academia destacó en un comunicado que Campos era un "piloto hábil y dedicado con una pasión innegable por volar". Además, obtuvo la calificación de Instructor de Vuelo Certificado, lo que consolidó su carrera en la aviación.

Condolencias y recuerdos de una vida dedicada al vuelo

Epic Flight Academy lamentó la pérdida de Campos a través de un comunicado: “Nuestro más sentido pésame para la familia, los amigos y todos aquellos que fueron impactados por esta devastadora tragedia. Nuestros pensamientos y oraciones están con ustedes durante este momento increíblemente difícil”.

Su tía, Beverly Lane, comentó al New York Times que el capitán había planeado tomar un crucero y visitar su país de ascendencia en el mes de febrero junto con su familia. Lane destacó que Campos había soñado con volar desde los tres años: “Creo que quería ser libre y elevarse como un pájaro”.

La tragedia y el recuerdo de sus colegas pilotos

Nicolás Shaw, uno de sus amigos cercanos y también piloto, relató que había hablado con Campos horas antes del accidente. Campos le mencionó que tenía un vuelo programado con una escala en Kansas. Tras no recibir noticias suyas, Shaw le envió el mensaje que solían compartir cuando no sabían uno del otro: “¿Estás vivo?”. Esta vez, no obtuvo respuesta.

La tragedia del vuelo 5342 de American Airlines deja un legado de valentía y dedicación. Tanto Jonathan Campos como Sam Lilley (copiloto del mismo vuelo) serán recordados por su pasión por volar y por el compromiso que demostraron en cada despegue. Su historia inspira a muchos pilotos y profesionales de la aviación a seguir sus sueños.

 

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