Niño desarrolla proyecto de robótica sin ayuda económica en Yamasá

Hay genios que alcanzan la cima a una corta edad, tal es el caso de Jasuel Rivera Marte, de 14 años, para quien la pobreza no ha sido obstáculo en su afán de crear robots con materiales reciclados.

No vivir con sus padres, sino con su padrastro de 82 años y ser pobre, no ha sido un impedimento para que el niño de 14 años Jasuel Rivera Marte sueñe con ser un ingeniero en robótica o un escritor famoso, según dice el menor.

El adolescente que llamó la atención del presidente de la República, Danilo Medina y de todos los presentes en el acto de inicio del año escolar, por sus inventos de máquinas pesadas a base de materiales artesanales como el cartón, jeringas, pegamento, bajantes de suero, es un emprendedor en ciernes.

Para explicar su invento el niño considerado como un genio en la comunidad El Caimito, de Yamasá, donde vive, habla con naturalidad del principio del físico y matemático francés Blaise Pascual.

Rivera Marte, quien terminó su ciclo de educación básica en la Escuela Rosalía de la Rosa, de Yamasá, construye con facilidad camiones volteo, patanas, grúas, cabezote, montacargas, restroexcavadoras y remolques.

Su rústico taller funciona en un pequeño cuarto de su vivienda, que es utilizado para madurar guineos y rulos, y para depositar los corotos de la familia.

Explicó que “ahí comencé a inventar con una jeringa con agua y basado en el principio de Pascal, la parte hidráulica de mis inventos y entonces comencé a ver cómo empujando el agua en el interior de la jeringa la cama del camión subía o bajaba, o el brazo hidráulico de la grúa se movía con facilidad a la derecha o la izquierda de acuerdo al empuje del agua”.

No ha sido una retranca para Rivera Marte vivir solo con su padrastro Juan Adames, quien aunque tiene 82 años de edad dice sentirse fuerte todavía.

Su papá vive con otra mujer y reside en la ciudad de Nagua y su madre en la capital, con otro hombre. Nos cuenta que por esta razón prefirió quedarse viviendo con el segundo marido de su madre, quien es Juan Adames.

La vivienda donde reside el menor es la número 33 en la comunidad El Caimito, en la carretera que conduce a Peralvillo.