jueves, 18 de febrero de 2016

Sobreviviente del naufragio narra penurias vivió en alta mar

SAN PEDRO DE MACORÍS, R.D.-Uno de los sobrevivientes del naufragio ocurrido la madrugada del pasado viernes a unas 35 millas náuticas de las costas de Los Guayacanes en esta provincia, cuando intentaban llegar a Puerto Rico en una yola, narró las penurias que vivió en alta mar.
Miguel Ángel De la Cruz (Joselo), de 28 años, quien es peluquero y está en recuperación en su residencia en el sector Punta de Garza, dijo que pagaron cada uno para hacer la travesía entre 700 y 800 dólares.
Señaló que los primeros en ahogarse fueron el organizador del viaje a quien identificó solo como Chichi y su esposa, los cuales se tiraron con salvavidas, pero que luego fueron vistos muertos.
Sostuvo que como sabe nadar pudo retirarse un poco del lugar y que se encontró con un pescador en una yola y lo rescató y le dio aviso de que detrás había más personas y que pudo rescatar cuatro más y, que otros pescadores pudieron rescatar a tres personas.
Expresó que el rescate de él y los otros siete se produjo el sábado, luego de haber pasado por una situación difícil.
Mientras que de ese sector continúan desaparecidos Bernis Lamou Marte, (Cuni), de 31 años, quien tiene una hija de cinco años y su esposa Milsi Peguero y, Francis Euris Rosario (Bole), de 43 años quien vivía junto a su esposa Virginia Troncoso y sus cuatro hijos.
Familiares de las personas que están desaparecidas, las cuales van al hospital Antonio Musa con la finalidad de saber de sus parientes, se quejaron de que la Armada de la República Dominicana y las demás entidades que trabajan en su búsqueda, le están escondiendo las informaciones.
Según versiones de algunos de los sobrevivientes, al notar la presencia de un avión de la guardia costera que se acercaba al lugar apagaron el motor y que luego no quiso encender y que una ola volteo la yola por lo que tuvieron que derramar la gasolina de varios garrafones y lo colocaron debajo de la embarcación para que no se hundiera.
Luego se quitaron la ropa y la amarraron de la yola para poder sujetarse, pero que muchos no pudieron mantenerse y desaparecieron.
De acuerdo a los informes para el viaje pagaron 21 personas, pero hacían 23 con el organizador y su esposa, quienes supuestamente residían en Puerto Plata.

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