¿Conoces tus metas en la vida?

Hay jóvenes que no saben qué estudiar una vez han finalizan el último año de bachillerato. También hay quienes después de haber cursado cuatro años o más en una carrera universitaria terminan realizando labores muy distintas a su profesión.

Las razones para que se den estos cambios son muchas. Pero algunos no lo hacen porque las oportunidades sean escasas, sino, más bien, porque al final se dan cuenta de que no es lo que les apasiona. Lo penoso es que a veces no buscan otras opciones, pues no tienen quizás los mecanismos para saber cómo alcanzar sus metas, así dice Gustavo Eduardo Periche, un hombre con conocimientos en consultoría, motivación y ‘coaching’ de vida.

Convencido de que esto pasa con frecuencia en República Dominicana, viene al país a ayudarle a descubrir cuáles son sus metas en la vida y a lograrlas dejando atrás los miedos.

La expriencia vivida es su mejor arma para orientar al respecto. “Cuando tenía 21 años me planteé la idea de estudiar filosofía y literatura. En ese tiempo de estudios, tuve la oportunidad de dirigir junto a otros catequistas una obra social en un barrio donde residen personas muy pobres. Ahí empecé a colaborar, impartiendo clases de gramática y me di cuenta de cómo las personas necesitaban a alguien que los ayudara y motivara para lograr algunas metas”.

Al tiempo que enseñaba a los demás, también aprendía. Fue ahí cuando aprovechó la oportunidad que se le persentó para abrir su propia librería. Este rol le permitió observar cómo las personas buscaban con ansias libros de autoayuda, con el fin de que los convencieran de poder hacer algo más en sus vidas. Esa realidad lo llevó a buscar una herramienta que le permitiera ayudarlas.

Cuenta que fue esa la razón que lo llevó a crear el proyecto Despierta, especial para este tipo de personas. A través de método enseña sobre cómo construir el futuro, organizar las ideas y ver realizadas las metas.

Periche está consciente de que a pesar de que todos tenemos la habilidad de razonar, a veces el ser humano no piensa antes de actuar. “A veces tomamos acciones  que al paso del tiempo nos demuestran que  en realidad eso no era lo que queríamos hacer”, manifiesta.

Un caso muy curioso que relata Periche es el de un señor que se le acercó porque necesitaba de su ayuda. “Me comentó lo siguiente: ‘Yo soy un gerente en una empresa muy conocida, pero hay algo que me gustaría hacer y no lo realizo porque me da vergüenza por mi edad”, dice.

Dice el ‘coach’ que una vez le reveló lo que le avergonzaba, procedió a ayudarle.  Hoy en día el hombre tiene su propia banda de rock, y ahora siente que puede realizar cualquier actividad, sin importar el cargo que tenga ni la edad, puntualiza.

Como este caso hay muchos otros, y eso precisamente es lo que quiere: continuar ayudando a las personas a descubrir qué es lo que quieren hacer en la vida, y sobre todo a dejar atrás los miedos que son el mayor obstáculo para el logro de cualquier propósito.

Para ayudar a las personas a conocer lo que verdaderamente les apasiona en la vida y a desarrollarlo es que el próximo 1a de julio dictará una conferencia, en el edificio Cowarking, que tiene como propósito dispensarles a los participantes las herramientas necesarias para conocer cuáles son sus metas en la vida.  

“Es una oportunidad para descubrir qué nos hace feliz, cómo dejar de pensar que estamos perdidos y cómo identificar lo que verdaderamente nos gusta”, sostiene Periche. Para finalizar, envía un mensaje a todos los padres: “No obliguen a sus hijos a estudiar lo que está en la generación de la familia. Denle la libertad de que escojan lo que ellos quieren”, enfatiza.

Identificar miedos y enfrentarlos
Miedo al rechazo: una de las situaciones más comunes se da cuando tienes miedo a que te rechacen.

Miedo a no creer en ti: por muchas razones, no aprendes a lo largo de tu vida a creer en ti mismo.

Miedo al fracaso: miedo a creer que todo te saldrá mal.

Miedo a creer que porque falles una o dos veces, ya no lo podrás lograr.

Miedo a creer que las metas se logran a la primera oportunidad.

Miedo al qué dirán: miedo a lo que diga la gente de ti si fallas.

Miedo a perder: temes quedarte sin dinero, si es un negocio, y a quedarte solo si estás casado.

 Miedo al éxito: porque sin darte cuenta crees que no puedes manejar algunas situaciones.

Piensas que porque eres exitoso, ya no te puedes equivocar y tienes que ser perfecto.

Miedo a no saber lidiar con todo lo que implica tener éxito.